Durante
más de 50 años, la Asociación Internacional de Fomento (AIF), el fondo del
Banco Mundial para los más pobres, ha asumido los retos más difíciles y
complejos. Una de las mayores fuentes de financiamiento para el
desarrollo, la AIF proporciona apoyo a la salud, la educación, la
infraestructura, la agricultura, la economía y el desarrollo institucional de
los países más pobres (la mitad del mundo), de las cuales se encuentran en
África. Estos países son el hogar de 2,5 mil millones de personas, de los
cuales 1,8 mil millones sobreviven con 2 dólares al día o menos.
Con la ayuda de la AIF, cientos de millones de
personas han salido de la pobreza mediante la creación de puestos de trabajo,
el acceso al agua potable, escuelas, carreteras, la nutrición, la electricidad,
y más. Durante la última década, el financiamiento de la AIF inmunizado a
casi la mitad de mil millones de niños, siempre y cuando el acceso a mejores
fuentes de agua para 123 millones de personas, y ayudó a 65 millones de
personas reciben los servicios de salud.
